Contamos con un área de servicio capacitada en intervenir sistemas de refrigeración y cocción, que trabaja de la mano con las necesidades del cliente para diseñar y ejecutar con éxito el plan de mantenimiento preventivo de sus equipos y preservar su óptima operación. Es recomendable realizar dicho mantenimiento con periodicidad mínima de entre 2 y 6 meses, dependiendo el tipo de equipo y sus condiciones de operación.

El mantenimiento consiste en la limpieza periódica de los equipos dependiendo de su uso, el procedimiento se basa en revisar partes eléctricas, mecánicas, sistemas de gas y lubricación de las partes móviles.

Este mantenimiento permite identificar las partes que requieren cambio en el corto, mediano y largo plazo, además ayuda a disminuir el número de mantenimientos correctivos gracias a la trazabilidad del estado de los equipos.